Con la declaración del Estado de Alarma motivado por la COVID-19, los pabellones deportivos españoles cesaron sus actividades y cerraron sus puertas. Durante estas semanas, las autoridades también han utilizado o reacondicionado algunos de estos recintos como centros hospitalarios o para acoger a personas, entre otros usos extradeportivos. Pero ahora que poco a poco vamos a ir avanzando en la desescalada, el deporte regresará y estos pabellones reabrirán sus puertas. ¿Qué medidas de higiene y desinfección se recomienda tomar antes de que vuelvan a la actividad? ¿Cuáles son los primeros aspectos que debemos verificar en la instalación deportiva y qué precauciones debemos tomar? ¿Todos los equipamientos y el pavimento deportivo siguen estando en perfecto estado para su uso y cumplen con las exigencias de seguridad para los usuarios? A continuación detallamos un checklist con medidas y recomendaciones para estos recintos deportivos indoor:
Recomendaciones para todo tipo de pabellones:
Realizar una desinfección general . Ejecutar una desinfección profunda en aquellos pabellones que se hayan utilizado durante estas semanas para un fin extradeportivo (centro hospitalario de campaña, albergue para personas sin hogar, almacén…) en función del uso excepcional que haya tenido el recinto. Aumentar el nivel de ventilación de los sistemas de climatización para renovar el aire de manera más habitual. Abrir todas las ventanas y puertas para que se ventile toda la zona de uso deportivo. Reforzar, siempre que sea posible, la limpieza de todos los filtros de aire.Reforzar las tareas de limpieza en todas las estancias.Comprobar que todo el equipamiento deportivo sigue cumpliendo con las especificaciones de seguridad según los manuales del fabricante (funcionalidad, anclajes, disposición dentro del pabellón…) para su uso por parte de los usuarios. Casi todos los pabellones cuentan con múltiples equipamientos deportivos que se deben revisar tras este periodo de inactividad, como porterías, canastas, postes,… Todos los equipamientos certificados conforme a su norma UNE correspondiente deben contar con un manual de mantenimiento suministrado por su fabricante en el que quedan reflejadas las especificaciones de seguridad que deben comprobarse. A modo de ejemplo la inspección a realizar tras estas semanas de confinamiento para una canasta a techo, teniendo en cuenta las indicaciones del manual del fabricante (en este caso es la canasta Mondosingle), constaría de las siguientes operaciones:
Comprobación del correcto funcionamiento de plegado y desplegado de la canasta. En las canastas motorizadas, con el tiempo y debido a golpes recibidos durante el uso, es posible que los finales de carrera se desajusten debiendo ser regulados nuevamente. En las canastas motorizadas, inspección del motorreductor, especialmente la zona de unión del eje con el tambor. En las canastas motorizadas, inspección de la instalación eléctrica: cuadro de maniobra, cableado, conexionado. En las canastas manuales, comprobación del correcto funcionamiento del cabestrante y de su sistema de bloqueo. Comprobación de las medidas reglamentarias (altura del aro al suelo, etc…). Verificación de que no hay elementos externos a la canasta anclados o colgados de ésta. Comprobación de las sirgas, que no presenten signos de rotura. En caso de deterioro deberán ser sustituidas inmediatamente. En el caso de existir subestructuras, revisar las fijaciones con las cerchas y con la canasta y el estado general de los materiales. Cada equipamiento deportivo cuenta con su manual de mantenimiento propio en el que quedan reflejados los aspectos específicos que se deben revisar para ese equipamiento en concreto. Si durante la inspección del artículo se observase cualquier desperfecto que no pudiera ser subsanado y afectase al funcionamiento del mismo o a la seguridad de los usuarios, se procederá a su retirada o clausura.
Medidas específicas para los pavimentos deportivos:
* A ntes de realizar cualquier actuación se debe valorar con la empresa/persona autorizada qué tipo de tratamientos y productos se van a utilizar, cómo pueden afectar a la calidad y estética de la superficie y si, a posteriori, se requerirá un tratamiento especial del pavimento.
1. Realizar una revisión visual de todas las juntas del pavimento.*
* En caso de observarse un fuerte deterioro del pavimento, Mondo pone a vuestra disposición una herramienta de autodiagnóstico con el que os realizaríamos un informe gratuito con valoraciones y recomendaciones de expertos de Mondo.
2. Comprobar que se mantiene la junta de dilatación perimetral.
3. Realizar un fregado usando agua y un detergente con un pH neutro (entre 7 y 9) sin la necesidad de agentes espumantes o disolventes. **
La limpieza rutinaria se puede hacer usando solo agua y un detergente con un pH neutro (entre 7 y 9) sin la necesidad de agentes espumantes o disolventes. Este tipo de limpieza, si se realiza de manera adecuada y regular, es suficiente para evitar la proliferación de bacterias y microorganismos en la superficie.
** En caso de que el pabellón se haya utilizado como hospital de campaña u otros usos durante este tiempo, se puede realizar un fregado del pavimento con hipoclorito de sodio rebajado al 20% con agua.
Este proceso se puede realizar con fregadora con conductor semi-acompañante y utilizando el disco de limpieza de color rojo 3M o similar. La primera pasada debe realizarse sin aspirar el agua para dar tiempo a que el producto de limpieza actúe. Este trabajo debe realizarse por sectores, dejando actuar el producto durante un mínimo de 15 minutos. La regulación de la aplicación de producto puede ser a mitad de aporte/caudal del indicador de la fregadora. Transcurridos los 15 minutos, se debe aspirar el producto aplicado.
Una vez aplicado el tratamiento a toda la superficie se debe fregar y aspirar con agua y detergente neutro, utilizando otro disco de limpieza de color rojo.
Es muy posible que el pavimento quede con un tono blanquecino debido a la disolución del hipoclorito de sodio en el agua. Este tono blanquinoso se irá suavizando conforme pasen los días y el pavimento esté en uso.
Si bien el uso de desinfectantes químicos en cualquier tipo de superficie es una forma de atacar químicamente cualquier posible microorganismo, también presenta un riesgo para la superficie misma. En los pavimentos de caucho, antes de usar cualquier detergente no neutro, es importante probarlo en una pequeña parte de la superficie, a ser posible no muy visible, para determinar cuánto afecta a la superficie la aplicación del detergente y ver si produce algún daño o cambio de color irreversible. Un tratamiento excesivamente fuerte puede dañar el pavimento, por lo que previamente a su uso es conveniente consultar con el fabricante del mismo.
Importante: Para la desinfección se deben seguir las indicaciones establecidas en las fichas de seguridad y en las fichas técnicas del producto con el fin de que estos no pierdan eficacia. Algunos ejemplos: las disoluciones pueden perder eficacia pasadas unas horas; si se mezcla lejía con agua caliente, el cloro se evapora y pierde su acción desinfectante…
¡Precaución! NUNCA se debe mezclar el hipoclorito de sodio con amoniaco ya que se puede formar cloramina, un gas muy tóxico.
1. Realizar una revisión visual de todas las juntas del pavimento.*
* En caso de observarse un fuerte deterioro del pavimento, Mondo pone a vuestra disposición una herramienta de autodiagnóstico con el que os realizaríamos un informe gratuito con valoraciones y recomendaciones de expertos de Mondo.
2. Comprobar que se mantiene la junta de dilatación perimetral.
3. Realizar un fregado usando agua y un detergente con un pH neutro (entre 7 y 9) sin la necesidad de agentes espumantes o disolventes. **
La limpieza rutinaria se puede hacer usando solo agua y un detergente con un pH neutro (entre 7 y 9) sin la necesidad de agentes espumantes o disolventes. Este tipo de limpieza, si se realiza de manera adecuada y regular, es suficiente para evitar la proliferación de bacterias y microorganismos en la superficie.
** En caso de que el pabellón se haya utilizado como hospital de campaña u otros usos durante este tiempo, se puede realizar un fregado del pavimento con hipoclorito de sodio rebajado al 20% con agua.
Este proceso se puede realizar con fregadora con conductor semi-acompañante y utilizado el disco de limpieza de color rojo 3M o similar. La primera pasada debe realizarse sin aspirar el agua para dar tiempo a que el producto de limpieza actúe. Este trabajo debe realizarse por sectores, dejando actuar el producto durante un mínimo de 15 minutos. La regulación de la aplicación de producto debe de ser al mínimo de aporte/caudal del indicador de la fregadora. Transcurridos los 15 minutos se debe aspirar el producto aplicado.
Una vez aplicado el tratamiento a toda la superficie, se debe fregar y aspirar con agua y detergente neutro al mínimo de aporte/caudal del indicador de la fregadora utilizando otro disco de limpieza de color rojo.
Es muy posible que el pavimento quede con un tono blanquecino debido a la disolución del hipoclorito de sodio en el agua. Este tono blanquinoso se irá suavizando conforme pasen los días y el pavimento esté en uso.
Si bien el uso de desinfectantes químicos en cualquier tipo de superficie es una forma de atacar químicamente cualquier posible microorganismo, también presenta un riesgo para la superficie misma. En los pavimentos de caucho, antes de usar cualquier detergente no neutro, es importante probarlo en una pequeña parte de la superficie, a ser posible no muy visible, para determinar cuánto afecta a la superficie la aplicación del detergente y ver si produce algún daño o cambio de color irreversible. Un tratamiento excesivamente fuerte puede dañar el pavimento, por lo que previamente a su uso es conveniente consultar con el fabricante del mismo.
Importante: Para la desinfección se deben seguir las indicaciones establecidas en las fichas de seguridad y en las fichas técnicas del producto con el fin de que estos no pierdan eficacia. Algunos ejemplos: las disoluciones pueden perder eficacia pasadas unas horas; si se mezcla lejía con agua caliente, el cloro se evapora y pierde su acción desinfectante…
¡Precaución! NUNCA se debe mezclar el hipoclorito de sodio con amoniaco ya que se puede formar cloramina, un gas muy tóxico.
¿Quién debe realizar la desinfección?
En aquellos lugares donde se hayan registrado casos potenciales o confirmados de COVID-19, las desinfecciones las acostumbran a realizar empresas autorizadas. Estas compañías deben contar con un número de registro de autorización y emplear procedimientos específicos basados en normas como, por ejemplo, la UNE-EN 16636.
Una vez llevada a cabo la desinfección y según el tratamiento utilizado, se requiere un plazo de tiempo de seguridad durante el que no se podrá acceder a la instalación deportiva (por ejemplo, en 12 horas).
¿Qué tipo de productos se pueden usar?
Existen diferentes productos virucidas según quién los vaya a utilizar y la finalidad. Un ejemplo es el desinfectante de alto nivel eficaz frente a virus con envoltura (coronavirus) de acuerdo a norma europea UNE-EN 14476 – Producto presto al uso certificado para la desinfección de superficies, utensilios, equipos, materiales y ambientes.
El Ministerio de Sanidad ha publicado un documento en el que se recopilan los productos virucidas autorizados en España, qué usuarios están autorizados a utilizarlos o en qué tipos de superficies se deben aplicar: