Dotar un terreno de juego con césped artificial conlleva muchas ventajas, tanto por sus prestaciones técnicas y deportivas como por aspectos relacionados con su versatilidad, resistencia, uso intensivo o menor mantenimiento. Sin embargo, tan importante es el nuevo césped artificial que se instala como que estén bien marcados los terrenos de juego para los distintos deportes que se van a practicar sobre él.
Algunos de los deportes más habituales que se juegan sobre césped artificial son el fútbol, rugby, tenis y pádel. Pero se debe tener en cuenta que cada modalidad deportiva se rige por normativas y reglamentos internacionales que fijan con exactitud las dimensiones que deben tener los campos para cada uno de estos deportes, qué partes deben señalizarse y qué anchura deben tener las franjas que se marcan sobre el terreno de juego.
Distintos deportes, distintas líneas de marcaje
Todas las líneas de marcaje son parte del juego. El ancho de las líneas tanto para fútbol como para rugby debe estar comprendido entre los 10 y 12 centímetros. Para tenis son más estrechas, de 5 centímetros, excepto en las líneas de fondo, que deben ser de 8 centímetros. En pádel, todas deben ser de 5 centímetros.
Como también es habitual que en un mismo campo de césped artificial se practiquen diversos deportes, se deben realizar diversos marcajes sobre el mismo dependiendo del uso deportivo que vaya a tener. Por ejemplo, es frecuente que en un campo de Fútbol 11 cuente con el marcaje transversal de dos campos de Fútbol 7. Los marcajes principales se realizan sobre césped de color blanco y, el resto, en otros colores como el amarillo, azul o rojo.
El marcaje, paso a paso
Para cualquier instalación deportiva equipada con césped artificial, el primer paso a la hora de plantear los marcajes es realizar una toma de datos, excepto en el pádel donde todas las pistas tienen las mismas dimensiones (habitualmente suelen ser de 20 x 10 metros). En esta fase se mide la superficie del manto de césped y, posteriormente, se preparan los planos de superficie y marcajes.
Cuando se ha completado todo el proceso de instalación del césped artificial, el siguiente paso es proceder al marcaje de las zonas de juego siguiendo las directrices establecidas en el plano de marcaje. Esta fase se realiza utilizando hilos de nylon, aunque también se puede realizar marcando las dimensiones de los campos con hilo (trazador de líneas) sobre el propio césped. Estas marcas sirven como referencia para el marcaje final.
Una vez planteados los campos que albergará ese terreno de juego, se corta la base de césped con herramientas especiales de corte provistas de cuchillas tipo cúter en las que se regula la anchura del marcaje a realizar, abriendo o cerrando más o menos esas cuchillas hasta la anchura deseada de corte. Se comienza siempre por las líneas más anchas.
Posteriormente se inserta el color de césped establecido para cada marcaje de campo. La unión del césped de color insertado se realiza mediante banda de geotextil, aplicando adhesivo de poliuretano bicomponente para su correcta fijación.
Cuando se ha terminado todo el proceso, las líneas son revisadas en toda su longitud separando los hilos blancos y verdes que hayan podido quedar pegados por la resina para conseguir un acabado perfecto.