Desde los comienzos del pádel se han utilizado diferentes soluciones como pavimento de las pistas: resinas sintéticas, cemento u hormigón poroso o pulido, todas ellas con diferentes resultados. Desde que se popularizó la práctica de este deporte, el césped artificial fue admitido rápidamente como la solución más eficaz ya que se trata de una superficie fundamentalmente cómoda y confortable.
Pero además el césped artificial ha evolucionado en los últimos años asociado al desarrollo del propio deporte y a los elementos necesarios para su práctica, como palas, pelotas, calzado o los propios elementos que forman parte de la pista: cristales, estructura metálica o iluminación.
Entre otros, existen dos aspectos clave en el estudio de la biomecánica de las superficies de césped artificial para pádel: la salud y seguridad de los jugadores, así como la búsqueda del máximo rendimiento deportivo -y por tanto calidad del juego- que garantice el espectáculo. La mayor parte de los proyectos de I+D+i tienen como objetivo la mejora de estos dos aspectos buscando la excelencia de las superficies deportivas para pádel.
Función deportiva
Es conveniente comprender que las superficies de césped artificial para pádel deben cumplir dos funciones diferentes, una función deportiva y una función técnica. La función deportiva abarca las propiedades del césped que contribuyen a disminuir el riesgo de lesiones y, al mismo tiempo, proporcionan unas óptimas prestaciones del jugador en términos de rendimiento deportivo y espectacularidad del juego. Es importante diferenciar entre dos aspectos, la interacción jugador-césped y la interacción pelota-césped.
Los criterios utilizados para evaluar la interacción jugador-césped son la reducción de fuerzas o absorción de impactos –relacionada con la capacidad del césped para reducir los esfuerzos que soportan los jugadores al correr o saltar-, la deformación vertical –relacionada con la modificación que soporta el césped con las acciones de los jugadores- , la tracción rotacional y tracción lineal –relacionada con el agarre de las suelas de las zapatillas y el césped-, y aunque en el pádel son inusuales las caídas, también la abrasión de la piel, aspectos estos determinantes en la seguridad del jugador.
Por otra parte, los criterios utilizados para evaluar la interacción pelota-césped son el bote vertical y bote angulado de la pelota.
Función técnica
Por su parte, la función técnica incluye las propiedades que garantizan que el césped conservará su función deportiva durante un periodo de tiempo determinado en función del entorno o medio y del nivel de uso al que va destinada la pista. Hay que diferenciar entre función técnica de la capa soporte o subbase y del propio sistema de césped artificial.
Algunos de los criterios de prueba que se realizan sobre la capa soporte son la capacidad de drenaje o evacuación de agua, la planimetría o las pendientes. Del mismo modo, algunos de los ensayos que se realizan sobre la superficie de juego son: simulación de desgaste (Método Lisport adaptado a las superficies de pádel), resistencia al envejecimiento climático (UV), deformación residual y cambio de apariencia del relleno de arena, resistencia de las juntas, etc.
Mejora continua
Los estudios de biomecánica aplicada han desempeñado un papel fundamental en la mejora de los sistemas de césped artificial, que han perseguido alcanzar las mejores prestaciones para la práctica del pádel, ya sea de alto rendimiento o como práctica lúdica no competitiva.
El césped artificial -siempre que sea de alta calidad y sus condiciones de instalación, conservación y mantenimiento sean las adecuadas y recomendadas por el fabricante- puede ser considerado como un pavimento seguro ya que aporta las condiciones biomecánicas óptimas para la práctica de cualquier nivel de juego.
En este sentido, es de vital importancia la elección del tipo de suela con el que están dotadas las zapatillas. No todas las superficies de césped cuentan con las mismas características o están en las mismas condiciones. La elección del tipo de suela puede claramente contribuir o evitar lesiones. Del mismo modo, pueden colaborar activamente a mejorar el rendimiento dentro de la pista. Es muy importante elegir el tipo de suela en función del tipo o estado de la superficie donde se va a jugar.